La capacidad estándar de un estanque IBC es de 1000 litros, proporcionando una solución eficiente para el almacenamiento y transporte de líquidos a granel.
Los estanques IBC suelen estar construidos con materiales duraderos como polietileno de alta densidad (HDPE) o acero galvanizado, garantizando resistencia y protección contra condiciones adversas.
Sí, muchos estanques IBC son reacondicionados y reutilizables. Esto no solo ofrece beneficios económicos, sino que también contribuye a prácticas sostenibles al extender la vida útil del producto.
Los estanques IBC están equipados con válvulas de descarga en la parte inferior. Para vaciarlos de manera segura, se debe abrir la válvula y dirigir el flujo del líquido hacia el punto de destino, permitiendo un control preciso del vaciado. Es importante seguir las instrucciones del fabricante y cumplir con las normativas de seguridad durante este proceso.